Hay que tener cuidado cuando uno elige un nombre para una banda de rock o para un equipo de fútbol porque puede que el nombre sea demasiado poco para un éxito inesperado o demasiado presuntuoso para el desempeño real. Y esto lo digo porque quien lee "La leyenda de los invencibles", de Horacio Convertini, sabe que el mote de "Invencible" no se lo podría poner ni Messi y que para un equipo de fútbol de barrio, con una performance llena de buenos intentos y nada más que eso, da para la gastada. Además, invencibles rima con inservibles. A cualquier pibe, con un poco de imaginación, se le podría ocurrir.
Un grupo de amigos, un viejo con ganas de revivir su juventud y de ayudar a los pobres pibes, siempre funciona. "Karate Kid", "Cuidado, Hércules vigila", son demostraciones de que la cosa funciona y que son historias aptas para repetir y repetir como el helado, que a nadie lo cansa. Porque la infancia llena de amigos e ilusiones siempre gana. Cuando hay equipo y esperanza, no te digo que son invencibles, pero si indispensables para vivir un sueño y convertirse en parte de la famosa canción del mundial 90.
Este es un libro de fútbol señores, donde se transpira la camiseta y se lustran los botines. Donde cualquiera que entrena puede jugar mejor, respetando la democracia del fútbol: cualquier tipo de cuerpo puede jugar (alto, bajo, flaco, morrudo). Y es un libro de amistad, de esos momentos de la vida que se extrañan de adultos y se tratan de recordar en una asado, con los amigos del primario, y ya sin mucho estado para jugar un picadito.
El cuento La Leyenda de los Invencibles se lo dieron a mi nieta, gracias al buen criterio de su seño, para leer ahora, durante la cuarentena. No conocía a su autor, no había leído ningún texto suyo, y a medida que me iban pasando los capìtulos, me sumergí en un mundo muy conocido por mí, por dos razones: amo el fútbol, (voy a todos los partidos que juega mi equipo glorioso en mi ciudad) y escribo cuentos y obras de teatro para niños, conozco un poquito del tema y quedé maravillada con el vocabulario (me recuerda tanto a mi niñez!!). Admiro en su autor la forma de llevar la trama, los recuerdos del padre, a modo de introducción y especialmente la expectativa que crea en los niños y en los adultos.Debo aclarar que voy por el capítulo 10 (mi nieta me los envía por mail a medida que su maestra se los va enviando) y mi ansiedad es un estímulo más para estar atenta a recibir sus mensajes. Comento con ella los pasos de la trama y compruebo que Horacio Convertini es un muy buen escritor para niños.
ResponderEliminarSí y también es un gran escritor para adultos (Ej. "El misterio de los mutilados" "New Pompey"). Otro texto para chicos que me gustó mucho es "El robo de la máscara sagrada".
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